LA FACUA DENUNCIA LA CAMPAÑA DEL DIA DE LA MADRE DE EL CORTE INGLÉS
En Sevilla El Corte Inglés fue un boom total. Había marujas y menos marujas que se arreglaban solo para ir a pasar la tarde dando vueltas por El Corte Inglés. Acostumbrados a Simago, Galerías Preciados y a las Siete Puertas los sevillanos alucinamos con aquel horror arquitectónico que se había llevado por delante el palacio del duque de la Victoria, en aras del progreso y el interés mercantil.
El marujeo llegó al límite con la apertura de El Corte Inglés de Nervión, mucho más moderno que el de la Plaza del Duque, y por tanto más in todavía. Quien no merendaba en El Corte Inglés no era nadie: un paria, un pobre desgraciado condenado al ostracismo... Durante años El Corte Inglés decidía si era hora de renovar sábanas y toallas o si los próximos ocho días iban a ser de oro. El papel de regalo con los triangulitos verdes era decisivo para revestir el obsequio de dignidad, y había hasta quien lo reutilizaba para dar gato por liebre y quedar bien.
Los años de gloria de El Corte Inglés pasaron hace mucho. A lo mejor es solo opinión propia, pero a mí me resulta obsoleto y hasta catetón. En cambio hay que admitir la calidad de sus campañas publicitarias, porque si no es primavera en El Corte Inglés media España entiende que no es primavera en ninguna parte.
La campaña del día de la madre se ha centrado este año en una foto de una señora muy normalita con la leyenda 97% entregada, 3% egoismo, 0% quejas: 100% madre, que ha logrado sorprender no por el anuncio en sí, sino por la capacidad que tiene este país de buscarle los tres pies al gato.
Hasta la FACUA encuentra denunciable el anuncio de marras por sexista, por fomentar según ellos "la presión social a la que se ven sometidas las mujeres desde niñas para ser madres". Empezaron por querer quitarnos las muñecas de Famosa sin entender que prohibiendo las muñecas fomentan la presión social para No ser madre, que la presión es igual de injusta se ejerza en un sentido o en otro, y que lo normal sería no meterse en camisas de once varas para que cada cuál hiciera lo que estimara conveniente... Pero no... ahora nos quieren quitar también el Día de la madre de El Corte Inglés...
El mensaje del 97%, etc... no es más que una tontería como otra cualquiera, destinada a que los hijos nos demos cuenta del sacrificio que hacen las madres. Cualquiera que tenga hijos sabe que la maternidad absorbe el tiempo y las energías de madres, padres y adláteres: no creo yo que reconocerlo sea para rasgarse las vestiduras, ni que obligue a nadie a poblar el planeta.
Yo de chica era muy niñazo, y cuando no estaba subida en un árbol jugaba con indios de colores y un tirachinas. Tenía una puntería que ríanse ustedes de Basili Saitsev (el francotirador de "Enemigo a las puertas")... Y eso no me impidió tener tres hijos. Vale que El Corte Inglés decide cuándo es primavera, pero cuándo reproducirse lo decide la primavera misma.
La cuestión es que toda esta manía de ver sexismo y malignos mensajes subliminales donde no los hay empieza a ser Kafkiana, y cansa lo que no está en los escritos. A mí el mensaje de El Corte Inglés no me parece denunciable: otras cosas hay de índole práctica que debían motivar más a la protesta de la FACUA y del progresismo... De mientras estoy segura de que las mujeres tendremos hijos o no, con quejas o sin quejas según nos dé la real gana, y no porque lo diga El Corte Inglés.
Las mujeres no somos tan absolutamente memas como para dejarnos influenciar por un Slogan aunque la FACUA así lo crea. Para meterse en estas cosas deben estar tan aburridos como las señoras que se arreglaban para pasar la tarde dando la lata a las dependientas en El Corte Inglés. Muchas de ellas después no compraban nada, porque todo era un puro aparentar como este tipo de preocupación por las mujeres...
Anden, que ya estamos mayorcitas para distinguir el culo de las témporas.
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